Entrevistamos a Marta Serrano, Directora de Programa en el Colegio Quercus de Madrid, quien nos cuenta su experiencia con el programa.
Marta ha asumido las responsabilidades de dirección del Diploma Dual durante los últimos cuatro años, siendo este el primer año en el que gestiona el programa en el colegio.
¿Qué tipo de tareas lleva implícita esta responsabilidad para los que sois Directores de Programa?
Mis tareas incluyen proporcionar información detallada a las familias, resolver dudas tanto de alumnos como de padres, y mantener una comunicación constante con los tutores estadounidenses. Además, coordino con los responsables de Academica en España y participo en reuniones con diversos cargos. También llevo a cabo sesiones informativas para las familias, lo cual es fundamental para asegurar el correcto funcionamiento del programa y brindar el apoyo necesario a todas las partes involucradas.
¿Qué cambios has ido notando en los alumnos inscritos en el programa a medida que han ido avanzando los años?
A medida que los alumnos inscritos en el programa avanzan en sus cursos, he notado cambios significativos en su desarrollo académico y personal. En primer lugar, el nivel de inglés de los estudiantes aumenta de manera notable, ya que están en contacto constante con el idioma. Además, aprenden a trabajar de manera independiente, lo que les permite organizarse de forma más efectiva; esta habilidad es transferible a otras materias y contribuye a su formación integral. Por último, al ser un programa 100% online, los alumnos se vuelven competentes en el manejo de diversas tecnologías, lo cual es esencial en el entorno educativo actual.
Estos aspectos no solo enriquecen su experiencia en el Diploma Dual, sino que también les preparan mejor para futuros desafíos académicos y profesionales.
¿Qué ventajas crees que aporta estudiar un curricular de un país diferente al nuestro, como el estadounidense?
Estudiar un currículo de un país diferente, como el estadounidense, ofrece numerosas ventajas. En primer lugar, proporciona una formación mucho más completa y enriquecedora en todos los niveles: personal, académico y social. Esta diversidad en la educación expone a los alumnos a diferentes perspectivas y metodologías de aprendizaje, lo que amplía su visión del mundo. Además, cursar un programa internacional abre puertas en el ámbito académico y profesional, favoreciendo oportunidades que de otro modo podrían no estar disponibles.
Por último, este tipo de formación fomenta la tolerancia y la cultura, ya que los estudiantes aprenden a valorar y comprender diferentes contextos y realidades, lo que contribuye a su desarrollo como ciudadanos globales. En conjunto, estas ventajas preparan a los alumnos para enfrentarse con éxito a los desafíos del futuro.
¿Crees que aprenden los alumnos realmente inglés? ¿Cómo dirías que es ese aprendizaje?
Sí, absolutamente, los alumnos aprenden inglés de manera efectiva a través del programa.
Este aprendizaje es práctico e inductivo, ya que utilizan el inglés como idioma vehicular en el estudio de las materias que se imparten en Secundaria y Bachillerato en EE. UU. Esto les permite no solo adquirir el idioma, sino también aplicarlo en contextos reales y académicos.
Además, deben participar en sesiones orales en inglés con sus tutores estadounidenses, lo que les brinda una experiencia de inmersión lingüística auténtica. También interactúan con otros estudiantes de diferentes países, lo que enriquece aún más su aprendizaje. Todas las lecturas, entregas de trabajos y evaluaciones se realizan en lengua inglesa, lo que les obliga a desarrollar tanto sus habilidades comunicativas como su comprensión del idioma. Este enfoque garantiza que los estudiantes no solo adquieran conocimientos teóricos, sino que también se sientan cómodos y seguros al utilizar el inglés en diversas situaciones.
¿Se nota ese nivel después a la hora de cosechar buenos resultados en la Selectividad?
Por supuesto, se nota un nivel significativo en los resultados de los alumnos en las pruebas de acceso a la universidad. Aquellos que están inscritos en el Diploma Dual suelen obtener resultados muy buenos en dichas pruebas. Es innegable que su mayor preparación a través de este programa es una de las razones fundamentales por las que alcanzan estos logros. Además, la mayoría de universidades tienen como requisito la realización de una prueba en inglés que certifique el nivel requerido para poder acceder a cualquier grado en la misma, y aquellos alumnos que han completado sus estudios en el Diploma Dual quedan exentos de realizar dicha prueba. Esto no solo refleja su dominio del idioma, sino que también subraya la eficacia del programa en la preparación de los estudiantes para sus futuros académicos.
¿Recomendarías el Diploma Dual a aquellas familias y alumnos que puedan estar pensando en mejorar su inglés? ¿Por qué?
Indudablemente, recomendaría el Diploma Dual a todas aquellas familias y alumnos que estén considerando mejorar su nivel de inglés. Este programa no solo les brinda la oportunidad de perfeccionar su dominio del idioma, sino que también les ofrece una formación más amplia y global, que los prepara para enfrentarse a los desafíos de una sociedad actual altamente globalizada y competitiva. Los estudiantes que participan en el Diploma Dual desarrollan habilidades lingüísticas sólidas y adquieren competencias necesarias para destacar en un entorno académico y profesional.
Sin duda, esta experiencia enriquecedora les permitirá ampliar sus horizontes y estar mejor equipados para el futuro.
Por último, ¿cuál ha sido tu mayor satisfacción como Directora de Programa a lo largo de estos años?
Mi mayor satisfacción como Directora de Programa a lo largo de estos años ha sido, sin duda, observar a alumnos altamente capacitados con resultados muy notables en mi materia. Además, es gratificante recibir comentarios de sus familias, quienes me trasladan que, gracias al Diploma Dual, sus hijos se están organizando mucho mejor en todas sus asignaturas. Sin embargo, el momento más emotivo y significativo para mí es ver a estos estudiantes en el día de su graduación, especialmente durante el evento Talent & Heart, que este pasado curso se celebró el sábado 6 de julio en el Palacio Vistalegre de Madrid. Esa ceremonia simboliza no sólo su esfuerzo y dedicación, sino también el impacto positivo que el programa ha tenido en sus vidas. Ver su crecimiento y éxito es, sin lugar a dudas, la mayor recompensa de mi labor.
